CLASICISMO
¿Qué es?
El clasicismo
literario hace referencia a un estilo de escritura que emulaba conscientemente
las formas y los temas de la antigüedad clásica, y que se desarrolló durante
las eras del Renacimiento y la Ilustración.
En este sentido, se
imitaba sobre todo a los grandes autores del período greco romano,
especialmente sus poetas y dramaturgos. Los autores del clasicismo literario
seguían sus principios estéticos y preceptos críticos.
CARACTERISTICAS
Los autores del
clasicismo literario exhibían un fuerte tradicionalismo, a menudo unido a una
desconfianza por la innovación radical. Esto se evidenciaba, sobre todo, en su
gran respeto por los escritores clásicos.
Así pues, la
suposición principal era que los autores antiguos ya habían alcanzado la
perfección. Entonces, la tarea básica del autor moderno era imitarlos: la
imitación de la Naturaleza y la imitación de los antiguos era lo mismo.
Las obras dramáticas,
por ejemplo, se inspiraban en maestros griegos, como Esquilo y Sófocles. Estas
buscaban encarnar las tres unidades aristotélicas: única trama, una única
ubicación y un lapso de tiempo comprimido.
Por otro lado, además
de la teoría de Aristóteles de la poesía y su clasificación de géneros, los
principios del poeta romano Horacio dominaron la visión clasicista de la
literatura.
Entre estos
principios, destacaba el decoro, según el cual el estilo debe adecuarse al
tema. También era importante la creencia de que el arte debe tanto deleitar
como instruir.
Asimismo, ante los
excesos del Barroco y el Rococó, en el clasicismo literario se impuso la
búsqueda de la corrección, del orden, de la armonía, de la forma, entre otros.
ORIGEN
El clasicismo
literario comenzó cuando Europa ingresó al período de la Ilustración, una época
que glorificaba la razón y el intelectualismo.
Este surgió luego del
redescubrimiento de la Poética de Aristóteles (siglo IV a. C.) por Giorgio
Valla, Francesco Robortello, Ludovico Castelvetro y otros humanistas italianos
en el siglo XVI.
Desde mediados de la
década de 1600 hasta 1700, los autores ejemplificaban estos conceptos siguiendo
la forma de la poesía épica de los antiguos griegos y romanos.
En especial, la
interpretación dogmática de las unidades dramáticas de J. C. Scaliger, en su
Poética (1561), afectó profundamente el curso del drama francés.
AUTORES Y
OBRAS
Pierre Corneille (1606-1684)
Pierre Corneille fue
considerado el padre de la tragedia clásica francesa. Su obra maestra, El Cid
(1636) rompió con la estricta adhesión a las tres unidades aristotélicas.
No obstante,
desarrolló una forma dramática que cumplió las normas tanto de la tragedia
clásica como de la comedia.
De su extensa obra, destacan Melita (1630), Clitandro o La inocencia perseguida (1631), La viuda (1632), La galería del palacio (1633), La siguiente (1634), La plaza Real (1634) y Medea (1635), entre otras.
Jean Racine (1639-1699)
Fue un dramaturgo
francés muy reconocido por su obra en 5 actos Andrómaca (1667). Esta obra
trataba sobre sobre la Guerra de Troya, y fue exitosamente presentada por
primera vez ante la corte de Luis XIV.
Algunos de sus
trabajos dramáticos incluyen obras como La Tebaida (1664), Alejandro Magno (1665), Los
Litigantes (1668), Británico (1669), Berenice (1670), Bayaceto (1672) y
Mitrídates (1673).
Jean-Baptiste
Molière (1622-1673)
Molière fue un
reconocido dramaturgo, poeta y actor francés. En sus obras Tartufo (1664) y El
misántropo (1666), demostró especialmente su dominio de la comedia clásica.
Además, algunos
títulos de su extenso trabajo son El doctor enamorado (1658), Las preciosas
ridículas (1659), La escuela de los maridos (1661), La escuela de las mujeres
(1662) y El casamiento forzado (1663).
Dante Alighieri (1265-1321)
El poeta italiano
Dante es un caso atípico en el desarrollo del clasicismo literario, ya que su
poema épico, La Divina Comedia (1307) apareció independientemente de cualquier
movimiento organizado.
En su trabajo de tres
partes, Dante se inspiró conscientemente en la poesía épica clásica,
específicamente en la Eneida de Virgilio.
Alexander
Pope (1688-1744)
El poeta inglés
Alexander Pope adoptó las técnicas clásicas durante la Era de Augusto. En El
rizo robado (1712-14) utilizó el formato de la poesía épica, pero parodiando el
tono (esto se conoce como falso-heroico).